A pesar de no haber índices oficiales a nivel nacional, la ludopatía en adolescentes es un problema visible que se agudiza en paralelo al crecimiento del sector del juego. Mientras que se siguen multiplicando las plataformas clandestinas, los operadores legales lanzan campañas masivas de publicidad para insertar sus productos.

El gobierno nacional avisó que la ludopatía adolescente no está entre sus prioridades.
Ludopatía en adolescentes: un fenómeno que sigue aumentando
Desde hace tiempo que Argentina parece ser uno de los focos de ludopatía en adolescentes en América Latina, territorio donde se viene asentando la industria del juego online. Sin respuesta desde el gobierno nacional, ahora los medios vuelven a visibilizar un problema difícil de erradicar.
En su último relevamiento, el Observatorio de Drogas ha informado que el 64% de las personas que han apostado en el último año, ya sea en canales presenciales u online, tienen entre 18 y 24 años. Esto evidencia un cambio en la franja etaria del público interesado en el juego.
Pero esos datos hablan solo de operadores legales, en los que se requiere la edad mínima de 18 años para apostar. Nada dicen esos indicadores sobre las plataformas clandestinas, que son el verdadero punto de conflicto. Allí es donde ingresan menores de edad a hacer sus primeras apuestas.
Esto se debe a que existe una enorme cantidad de operadores sin licencia que facilitan el acceso de niños, niñas y adolescentes. No requieren verificación de la identidad, que es un paso obligatorio en el juego legal, ni controles sobre la fuente del dinero.
La popularidad de estos sitios clandestinos se puede ver en escuelas, centros deportivos y todos los ambientes donde se reúne la juventud. Es un fenómeno sobre todo diseminado entre varones, pero la ludopatía digital en adolescentes también llega a las mujeres.
Puntos para detectar la ludopatía en niños y adolescentes
Los relevamientos y las declaraciones de víctimas hasta el momento dan cuenta de algunos puntos significativos en el desarrollo de la patología. Uno de los puntos clave es el acceso temprano a las apuestas, generalmente online. Los menores indican que su comienzo es a partir de los 14 años, o incluso antes.
El contacto con el juego en esa edad es una de las causas de la ludopatía en adolescentes. La grupalidad es otro de los factores decisivos. A pesar de que las apuestas se colocan de manera individual y cada usuario tiene su dispositivo, las pérdidas y las victorias se suelen comunicar con los demás.
Los primeros pasos en una plataforma de juego online están asociados con la apertura de las billeteras electrónicas, a los 13 años. Esta es la misma edad que implementó en el actual gobierno nacional para el uso de herramientas complejas de inversión financiera, otro tipo de “timba”.
A medida que la problemática se agudiza, el individuo comienza a tener cambios de hábito y de humor. Esto puede ser por quedarse toda la noche apostando, siguiendo eventos deportivos de países remotos, y por las pérdidas que haya sufrido.
De cualquier manera, son indicadores complicados de diagnosticar claramente en adolescentes, cuya personalidad está sujeta a fuertes cambios que van moldeando su identidad.
Cómo prevenir la ludopatía en adolescentes
Desde el lado de las familias, todo intento de sacarle el celular a un adolescente tendrá consecuencias peores. Para el grupo de allegados es muy difícil cortar con la adicción y lo más conveniente es buscar ayuda especializada en centros de salud.
Sin ir más lejos, solo en el Hospital Álvarez de la Ciudad de Buenos Aires ya hay más de 20 pacientes de entre 16 y 23 años, todos ellos varones. Al tratarse de un fenómeno a gran escala, en el que intervienen numerosos actores, la única respuesta eficiente pueden ser políticas públicas.
Sin embargo, el juego es un tema que depende de cada provincia y el gobierno nacional ya avisó que la ludopatía en adolescentes no está en su agenda, a pesar de que la Cámara de Diputados ya aprobó un proyecto de ley que le pondría fin a la publicidad de juego en el país.
No obstante, en el Senado el tratamiento de esta ley parece haberse trabado y no hay muchas esperanzas de que se le dé paso a una nueva normativa. Argentina sigue permitiendo el marketing sin límites del sector: uno de los principales problemas de fondo.