Un nuevo riesgo: las apps de IA para apuestas deportivas

Las nuevas apps de inteligencia artificial para apuestas deportivas representan riesgos para personas vulnerables y empeoran el escenario para los ludópatas. La tecnificación de las apuestas entrega una falsa sensación de control que de ninguna manera se condice con la impredecibilidad de los eventos deportivos.

IA sugiere apuestas a un joven inseguro.

La inteligencia artificial se ha comenzado a usar para predecir resultados deportivos.

La IA en las apuestas deportivas: ninguna garantía de certeza

En el último año, y particularmente en los últimos meses, se ha visto un avance notorio de la inteligencia artificial en la vida cotidiana. Lo quieras o no, esta tecnología ya se ha instalado en las actividades más cotidianas, como las búsquedas en navegadores de Internet.

Y, a priori, no hay nada de malo en eso. La IA es una herramienta como cualquier otra: dependiendo de su utilización puede llevar a buenos o malos resultados. Los problemas comienzan cuando se la vincula con áreas sensibles, como es el caso de las nuevas apps de inteligencia artificial para apuestas deportivas.

Se trata de productos que definen predicciones deportivas a partir de una enorme base de datos, que son procesados por el sistema lógico-conceptual de la IA. Hasta allí todo muy bien. El drama comienza cuando los usuarios le asignan un mayor valor de verdad a las predicciones de la IA. Como si los resultados deportivos no tuvieran un fuerte componente azaroso.

En efecto, se han comenzado a oír voces que alertan sobre los riesgos de las apps de IA para apuestas deportivas. Uno de ellos es Luis Miguel Garay, director del área de Ciencias de la Computación y Tecnología de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), España, que señala estos sistemas como contenidos engañosos.

Garay señala que los usuarios tienden a confiar ciegamente en las predicciones de la inteligencia artificial, lo cual representa un sesgo perceptivo. Algo que viene a agravar los condicionantes de las personas con adicción al juego, que encuentran en estas apps un fomento extra para apostar.

Cómo funcionan las apps de IA para apuestas deportivas

Es cierto que estas plataformas consiguen procesar cantidades gigantes de datos en fracciones de segundo. Y sin dudas tienen acceso a un amplio acervo de fuentes de información. Nadie pone en duda la capacidad de la inteligencia artificial.

Estas apps recopilan Big Data sobre el historial entre los equipos, la actualidad de los jugadores, y en suma todas las variables que afecten al encuentro. Todo esto pasa por el sistema de Machine Learning, que toma decisiones basadas en los datos. Finalmente generan los pronósticos, e incluso indican algunas apuestas convenientes, por sus cuotas o mercados.

Sin embargo, todo este procesamiento no es muy distinto del que puede hacer un profesional del deporte, excepto por la cantidad de datos recopilados y por el tiempo que toma la tarea.

Además, las predicciones de la inteligencia artificial comparten la misma falencia que las predicciones de la inteligencia humana: no pueden controlar el azar que le es inherente a un evento deportivo.

Falsa idea de control sobre los deportes

Esta combinación de técnica, información y virtualidad puede acabar siendo letal para un ludópata. Lejos de disuadir a los usuarios de apostar, las apps de inteligencia artificial sugieren un mayor grado de control sobre la situación.

Es una noción absolutamente falsa, puesto que no existe ningún algoritmo mágico que pueda predecir, no solo los resultados deportivos, sino absolutamente ningún evento del mundo real con total seguridad. Las apps no hacen más que tecnificar la ludopatía mediante la tecnología: las decisiones pasan a estar en manos de un responsable superior.

La manera en la que se publicitan estas herramientas es parte del problema. Están anunciadas como soluciones definitivas a las apuestas deportivas. Las envuelve un halo de misticismo como a un gurú; en verdad muchas de ellas llevan la palabra “gurú” en su nombre o en su slogan.

El público más joven, que tiene la característica de ser nativo digital, está más vulnerable frente a estos estímulos. Sobre todo, porque se sigue creando un mercado en el que las apuestas deportivas son parte del sentido común.

De hecho, muchas de esas apps, por ser meramente informativas y no casas de apuestas, carecen de controles de edad. Esto quiere decir que los menores las pueden descargar e instalar en sus dispositivos. Algo para lo que todavía no hay regulaciones en ningún país del mundo.

El verdadero aporte de la IA para las apuestas deportivas

El resultado de los partidos es algo que ni la inteligencia artificial ni nadie puede saber. Pero sí hay muchas otras áreas relacionadas con las apuestas en las que la inteligencia artificial podría ser fundamental. Una de ellas: el juego responsable con IA.

La IA sería (y, en algunos operadores, ya es) un recurso excelente para monitorear el comportamiento de los usuarios y establecer patrones potencialmente dañinos. También serviría para establecer límites automáticos en relación con los ingresos del jugador, si esos datos estuvieran vinculados.

Ya hay empresas de juego que han delimitado su base de usuarios a aquellos jugadores con hábitos más responsables. El ejemplo más claro es la firma sueca Paf, que ha hecho uso de la IA en el proceso. Luego de erradicar a los usuarios de más pérdidas, e incluso tras una suba de impuestos, la compañía ha seguido creciendo.

La inteligencia artificial también se puede utilizar en el monitoreo de fondos para prevenir el lavado de activos. Este es uno de los delitos más comunes en las plataformas de juego online. Algunas autoridades regulatorias, como Coljuegos en Colombia, han dado este paso en el control de los operadores.

Hay en verdad una gran cantidad de cuestiones relacionadas con las apuestas que la inteligencia artificial podría mejorar: la moderación de la publicidad, la generación de consciencia sobre los riesgos asociados, el combate de la corrupción en el deporte.

Y seguramente haya muchos aspectos más, pero hay algo para lo que la inteligencia artificial no sirve y es para predecir el resultado de las competencias deportivas. Un asunto que debe quedar muy claro antes de que la confusión sea demasiado grande.

Jerónimo Corregido – Estafa.info – Editor jefe de la sección de noticias
Por ahora, las apps de inteligencia artificial para apuestas deportivas no son más que un fomento para la ludopatía.