Escrito por: Juan Carlos PeralesSe trata de un buzón de correo electrónico habilitado por la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) para el robo de identidad en juego online. Las personas cuyos datos se estén utilizando ilegalmente por terceros en plataformas de apuestas podrán hacer llegar sus denuncias directas.
La DGOJ sigue apuntalando la seguridad en el juego online.
Buzón de la DGOJ para denunciar suplantación en España
La Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) ha lanzado un nuevo buzón de correo electrónico para denunciar la suplantación de la identidad en plataformas de juego online. La dirección es: dgoj.pacs@ordenacionjuego.gob.es.
Según se comunicó en el sitio web, está abierta a los contribuyentes de España que tengan sospechas de que sus datos fiscales están siendo utilizados para hacer apuestas online en su nombre, así como a aquellas personas que hayan recibido la notificación de la Agencia Tributaria de España (AEAT).
Tras recibir el correo electrónico, la DGOJ realizará distintas pruebas para constatar que los datos del denunciante están siendo utilizados sin su permiso. Luego indicará los pasos a seguir para cada caso. La institución facilitará los datos a las Fuerzas de Seguridad del Estado para su investigación.
Ya existe un curso de acción organizado entre la Policía Nacional, la Guardia Civil y las plataformas de juego online para que las víctimas procedan a la normalización en el uso de sus datos.
La DGOJ especificó que se trata de un paso más en la lucha contra el fraude en España, esta vez enfocándose en los delincuentes que evaden impuestos en casinos online y casas de apuestas utilizando datos de terceros. Es un fenómeno que ha crecido en el último tiempo.
Lo que consiguen los usurpadores de la identidad es no pagar el Impuesto sobre la Renta correspondiente a las ganancias en apuestas online. Se trata de maniobras fraudulentas ligadas al lavado de activos a gran escala, pero también a pequeñas organizaciones que consiguen enriquecerse de manera ilegal.
Misma orientación para la DGOJ
Bajo la nueva gestión del sector de Consumo, la DGOJ ha mantenido la misma perspectiva que la caracteriza desde su surgimiento. Esta nueva medida para proteger a los consumidores forma parte de un lineamiento integral orientado a la seguridad en la gestión de datos.
En efecto, desde la DGOJ se viene trabajando en proyectos para compartir información con plataformas de juego online, en función de maximizar los controles sobre el lavado de dinero. En la actualidad, para registrarse en un casino online de España es necesario verificar la identidad de manera rigurosa.
Esto, junto con otras medidas, ha conseguido que el país tenga uno de los entornos de juego online más seguros de Europa. Como contrapartida, las empresas del área han reclamado la falta de flexibilidad en materia publicitaria y de patrocinio.
Estos señalamientos desde el sector privado no han impedido que los ingresos del juego online siguieran creciendo de manera sostenida. Aún con las restricciones al marketing, el mercado español es sumamente rentable. La proyección a futuro tiene muy buenos augurios.
Suplantación de la identidad y otras estafas online
La suplantación de la identidad consiste en un ataque informático, generalmente enviado de manera deliberada en forma de virus. Puede incluir un enlace malicioso, y también incluye robo entre pares, tales como la creación de un perfil falso en una red social.
Hay distintos tipos de objetivos por los cuales los delincuentes recurren a la suplantación de la identidad. En general, en el caso de el uso de datos para el juego online, se trata de una evasión fiscal, es decir, es un objetivo económico.
Otro tipo de estafa que prospera en España, a pesar de no ser nada nueva, es la telefónica. Hoy en día los delincuentes parecen haber ganado originalidad con sus métodos, pero lo más común es que se hagan pasar por algún familiar. Se recomienda alertar de este fraude a las personas mayores y a los niños.
El phishing es uno de los recursos más molestos, puesto que consiste en el envío de mensajes, por lo común mediante correo electrónico, con el fin de obtener datos de cuenta. En estos casos los estafadores se hacen pasar por entidades bancarias o plataformas de pagos.
Es normal detectar que se trata de phishing y no de una comunicación oficial porque puede haber errores de tipeo, remitentes sospechosos y fallas en el diseño del mensaje. No obstante, los estafadores se han puesto cada vez más minuciosos, así que hay que tener reparos extra.
Como regla general, se debe saber que ni los bancos ni las empresas de pagos pedirán datos sensibles. Por eso es que al recibir solicitudes para compartir información privada, lo primero que se debe hacer es sospechar.
