Los casinos mexicanos esperan mantener su ritmo de crecimiento

A pesar del ajuste fiscal que se aplicará sobre casinos online y casinos de tierra, las proyecciones de la industria son optimistas de cara al futuro. La principal patronal del sector espera que se dupliquen las visitas anuales en salas de juego para el año 2030.

Mapa ilustrado de México con iconos de casinos que reflejan la expansión del sector.

AIEJA espera que los casinos mexicanos reciban hasta 10 millones de visitantes al año.

Casinos y casinos online: lo que se espera en México

El sector de juego sigue creciendo en México, y tanto los casinos online como los casinos de tierra cuentan con indicadores auspiciosos para el futuro. La aceptación social de las apuestas es cada vez mayor, y se apuntala sobre la base de fuertes inversiones en marketing.

Si bien los casinos online legales tienen proyecciones de crecimiento más marcada en el corto plazo, los casinos de tierra continúan representando la gran mayoría de los ingresos para el sector. Y, lejos de contraerse ante el impulso del juego digital, los establecimientos clásicos apuntan a mantener sus cuentas en alza.

De hecho, según la Asociación de Permisionarios Operadores y Proveedores de la Industria del Entretenimiento y Juego de Apuesta en México (AIEJA), en los últimos 7 años se duplicó el gasto medio de clientes de casinos, al pasar de 320 MXN (unos 19 dólares a 480 MXN (28 dólares).

Además, Miguel Ángel Ochoa, presidente de AIEJA, ha anunciado que para 2030 se espera duplicar el número de visitantes anuales en casinos de tierra, que llegaría a los 10 millones. El desarrollo de la industria del turismo estará íntimamente ligado al avance de las salas de juego.

Suba en la carga fiscal y proyecciones para la regulación

Los pronósticos positivos para la industria del juego no parecen mermar demasiado ante las actualizaciones regulatorias. Desde la Secretaría de Gobernación (SEGOB) se anunció un plan para incrementar hasta el 50% los impuestos del sector, en un paquete que implica mayores cargas fiscales para videojuegos violentos, bebidas azucaradas y tabaco.

Se espera que el gobierno consiga recaudar cerca de 5.000 millones de pesos, que serían destinados al financiamiento de áreas claves en la salud, sobre todo campañas de prevención de la ludopatía. El proyecto ha generado una gran resistencia en el empresariado, a pesar de que no comprometerá su rentabilidad.

La principal preocupación es que se dé una migración de usuarios hacia la oferta clandestina, que no paga impuestos y puede ofrecer condiciones mejoradas de premios y apuestas. Se calcula que este tipo de establecimientos representan más del 60% del total. Los casinos mexicanos legales, por el contrario, podrían sufrir un proceso de desinversión.

Desde AIEJA han defendido la actividad de las empresas de juego en el país, haciendo hincapié en que cada año se pagan más de 10.000 millones de pesos en impuestos y se generan 60.000 puestos de trabajo directos junto con otros 144.000 indirectos.

Casinos online: el futuro de la industria

Si bien el juego localizado tiene mucha más consolidación en el país, los casinos online mexicanos son los que marcan el ritmo de crecimiento. Son varios los factores que contribuyen a este fenómeno. Entre ellos, la penetración tecnológica, caracterizada por la llegada de internet al 78% de la población.

Otra variable es la publicidad masiva de apuestas online, tanto en competiciones deportivas como en redes sociales. Con esto, la industria se ha instalado en el sentido común de la sociedad.

Tanto es así que se calcula que el 33% de los jugadores online realizan apuestas al menos una vez por semana mediante plataformas digitales. Es uno de los índices más altos de la región. Las slots son el contenido con mayor demanda, aunque, por las particularidades del mercado, las apuestas deportivas ganan cada vez más lugar.

Ximena Flores – Estafa.info – Autora experta en casinos y apuestas en México
Los casinos online tienen más impulso de crecimiento, pero los casinos de tierra siguen manteniendo su hegemonía.
Escrito por: Ximena Flores